Tras varios meses de incertidumbre, durante el pasado mes de mayo, la Federación Internacional de Baloncesto (FIBA) ha decidido levantar la sanción impuesta a la Federación Española de Baloncesto, permitiendo que nuestra selección pueda participar en competiciones oficiales, entre ellas, los próximos JJ.OO. de Río y el Eurobasket 2017.
La sanción impuesta tenía su origen en el apoyo mostrado por la Asociación de Clubes de Baloncesto (ACB) a la Euroliga en contra de la competición europea auspiciada por FIBA Europa (Champions League de Baloncesto). Así, además de España, países como Italia, Turquía, Israel, Grecia, Rusia o Croacia, cuyos clubes mostraron su intención de continuar participando en la Euroliga, habían sido sancionados con la prohibición de participar en competiciones internacionales.
El levantamiento de la sanción ha requerido, al menos en España, una participación activa de las autoridades deportivas. En este sentido, el Consejo Superior de Deportes (CSD) anuló el pasado 12 de mayo una decisión anterior de la Asamblea General de la ACB por la que, dando libertad a sus miembros para la participación en cualquier competición internacional, se decantaba nuevamente por la Euroliga.
Paralelamente, el conflicto ha sido juzgado por un tribunal de Múnich, ciudad donde FIBA Europa tiene su sede, decretando dicho tribunal, hace escasos días, que las sanciones impuestas por FIBA Europa y FIBA son ilegales y que, por tanto, no puede prohibírseles a las selecciones nacionales la participación en competiciones para las que hubieran obtenido la clasificación correspondiente. El tribunal añadió que, de persistir las sanciones o imponerse otras distintas, se considerarían infracciones a dicha resolución y sería FIBA Europa la que sería sancionada en cada caso con 250.000 euros o seis meses de prisión (a cumplir por el Director Gerente de FIBA Europa). Posiblemente, el conflicto continuará.
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