El pasado cinco de abril conocimos la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad de Madrid en el denominado caso Pedro León. Esta, por ahora, última resolución ha dado la razón a la Liga de Fútbol Profesional (LFP) en el conflicto abierto con el jugador, así como con la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE).
Como recordarán, la disputa surgió cuando el Getafe decidió no dar de alta al futbolista para que pudiera disputar la Liga, alegando que el importante salario del jugador provocaba que el presupuesto del club se disparara superando los límites presupuestarios del Getafe fijados por la LFP, atendiendo a los principios del ‘fair play’ económico.
Sin embargo, como un episodio más de la batalla existente entre la LFP y la Federación Española de Fútbol, esta concedió licencia provisional al jugador para que pudiera participar en la Liga.
Aunque Pedro León terminó jugando en aquella temporada para el Getafe (de hecho sigue haciéndolo) el conflicto jurídico ha seguido discutiéndose ante los tribunales.
La indicada sentencia ha declarado que la LFP tiene competencias para establecer normas de control presupuestario de los equipos participantes y que entre esas normas puede incluirse la denegación de la tramitación de la ficha de un jugador si, como consecuencia de la misma, se exceden los límites de coste de plantilla para la temporada correspondiente, lo que, en suma, supone blindar las competencias de la Liga en materia de fijación de condiciones y requisitos económicos de sus participantes.
